A veces hablo del último concierto, la última prenda, el último tipo al que conocí. Y eso da una imagen algo extraña de mi apasionante vida. Así que contaré mi último domingo.
Me levanto temprano y montamos un mueble de Ikea.
Descanso.
Bajamos a comprar el diario y tomamos el aperitivo con una amiga.
Montamos un mueble de Ikea II.
Quedamos con una pareja embarazada para merendar.
Vuelta a casa; en la tele dan Bridget Jones.
el cambio de letra al final hace la historia aún más inquietante
ResponderEliminarBueno, se parece más a uno de mis sábados. En los domingos suelo tener la misma actividad que una ameba.
ResponderEliminardebes tener la casa llena de muebles.
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