los chicos de la cruz roja

Una cena de treintañeros es diferente a una cena de veinteañeros. Una cena de treintañeros es una cena de treintañeros aunque la mayoría de los cenantes sean veinteañeros. Y te das cuenta cuando los temas dejan de ser la última borrachera y comienza a hablarse de temas inhóspitos. Como los infartos. Uno de los comensales nos informa sobre qué hacer si alguien sufre un infarto. Una compleja retahíla de manipulaciones e instrucciones de la que sólo recuerdo “llamar a un médico”. Pero ¿y si es uno mismo el que sufre el infarto? Lo mejor entonces es toser.
Mi apasionante capacidad de sintetizar me ha llevado a una sencilla conclusión. Si alguien cercano a ti sufre un infarto, dile muy suavemente; tose.