bassi

Leo Bassi es un hombre inteligente al que nadie comprende. Al menos en una de las dos cosas se parece a mí. Por la otra a él le ponen bombas y a mí no. También se diferencia de mí en que yo no hablo 7 idiomas, no vengo de una familia de payasos, no lleno teatros y no suelo comer mierda en público. Y por supuesto, no tengo su afán provocador. Provocar es fácil. Hacerlo de un modo inteligente es más dificil.
En su último espectáculo Leo Bassi vuelve a la Revolución Francesa y opta por una sociedad laica y científica. Podríamos hablar mucho sobre la ingenuidad de creer en la ciencia, pero al menos es la suya. Y hoy no está muy bien vista.
Critica a alguien que habla directamente con Dios, que recibe sus órdenes al oído y que incluso dice haber sido elegido por él. Le llaman "Papa". En cada entrevista con Bassi aparece el mismo tema; católicos y musulmanes, caricaturas de Mahoma. Bassi nunca hubiera criticado una religión que se queda fuera de su espectro cultural. Nunca diría que los malos son los otros. Nunca son los americanos los culpables de todo.