chad, el chad

La noticia de la semana es aquella de “el arca de zoe” y los aviones españoles. Como es habitual, los españoles detenidos en el extranjero son inocentes. En este caso se veía venir; un ministro de exteriores se reuniría con alguien del Chad, le ofrecería el oro y el moro y se traería a sus compatriotas. Como siempre, vamos. Bueno, ahora el que va es Sarkozy, que prefiere salir en todas las fotos recogiendo a las azafatas.
Total, que ahora han liberado al piloto y al resto de españoles. El piloto es el protagonista de un genial video en el que el presidente del Chad le decía que eran pedófilos y él respondía; “no somos pedófilos, somos españoles”.
El Chad. Alguien debería explicarme porqué El Chad se llama El Chad y España no es La España. Y que me expliquen también por qué en dos semanas el presidente de (el) Chad aún no ha sido nombrado por su nombre.
Al final, como siempre. La gente acaba relacionando “er chá” con los pedófilos. A ver cómo le explico a mi madre que lo que hace la gente con los ordenadores no tiene nada que ver con el país.