Antes se sentaba uno frente al fuego y se pasaba horas mirando la llama, el cambio de color de tamaño de forma, el baile. También podías utilizar la punta candente de un palo y jugar a hacer formas, o simplemente moverlo en círculos.
Desde mi punto de vista, hoy que se va tan poco al campo y se pasa tanto tiempo frente al monitor, este es el fuego del siglo XXI.
Lo sé lo sé, con esa música estaba cantado que me iba a gustar.
Trentemoller strikes again. on Vimeo
Vía llamamelola.