Caí en la trampa

Sigo sentado frente al ordenador tratando de recolectar los gigas de música que voy a meter en el iPod.
Lo sé, siempre dije que no al iPod, que no tiene radio, que los hay con más calidad, con más prestaciones, que lo único bueno que tiene hoy por hoy (antes fue de los pioneros en meter en tan poco tamaño tanta capacidad) es que siendo tan popular hay miles de accesorios. Y esa es la trampa, los accesorios. Porque claro, si no tiene radio pero tiene un accesorio para ponérsela que ademas sirve de mando a distancia, y tiene su funda para llevarlo en la cintura cómodamente como hago con mi creative (mientras veo a la gente correr con sus cacharros en la mano o en el brazo, que tampoco me convence), o tiene su cacharro en plan Hi-Fi (aunque cueste el triple que comprar un equipo bueno y un cable para conectarlos), o el accesorio para correr (solo para el Nano, que es el de Soft), o el transmisor fm para el coche (el que ya tenía me vale) etc.
El caso es que a accesorios no le ganan. Y un tonto de los accesorios y los botones como yo unido a una persona sin miedo a dar el paso de comprarlos como soft resulta una mezcla explosiva para el bolsillo.

De las modificaciones en plan SO como ponerle Linux y cosas por el estilo y añadidos tipo "juega al Doom en tu iPod" os hablaré más adelante, cuando no tenga miedo de hacerle perrerías. Por ahora sigue brillando y con su pegatina protectora puesta.